A los del ensueño en libertad,
no nos gustan las vallas
de ningún sucio corral,
ni las tierras pateadas
hasta que la hierba no crece,
dando vueltas al pesebre,
donde no hay ni frío, ni hambre,
pero los ruidos de los esclavos,
sus pataletas y enfados,
son ingrata vecindad.
Preferimos el campo en soledad,
la hierba fresca del rocío,
la compañía de los pocos,
y si hay vallas, que estén lejos,
que pintar las alambradas
con banderas de colores
es engaño para pobres,
que toman a Dios
en ruedas de molino,
y son incapaces de verlo
en los ojos del vecino.
Esta sociedad de dormidos,
que justifica el expolio
de los corrales ajenos
y la muerte de sus moradores
mirando hacia otra parte,
no merece seguir viviendo.
No lo merece, no,
El verichip viene ya,
vienen los terminators:
les molesta a los pastores
las heridas infectadas
de las orejas etiquetadas
en las ovejas de colores.
No les preocupa el ganado,
les desvela lo perdido.
Porque a las cadenas de televisión las llaman cadenas?
ResponderEliminarA quién se le ocurrió?
Y como los esclavos no lo ven?
Es una red mental, una jaula de ideas, cuánto pajarito cantando a sus barrotes!
Aún hay tántos seres sufriendo, rompamos de una vez todas la cadenas y volemos hacia la libertad, derecho inalienable. Los que sí vemos la realidad no seremos nunca esclavos.
ResponderEliminarNo soporto ni los pájaros enjaulados, salgamos de la nuestra, la mental que no nos deja vivir
Abrazos. Domi.
esta claro tocayo por que te encadenan a sus lineas de comedura de coco
ResponderEliminares un peligro que sin embargo cada día capta a mas y mas adeptos en eso se basa la maquinación de la mente humana tu mira pero no pienses
un abrazo amigo