Váyase usted, con su ruta madre, por sus hijos caminos.
Yo quisiera saber
le declaración de renta del rey,
la del principito
y la de su mujer.
Repetir, repetir, repetir,
hasta que la simulación se plasme.
Todo es mentira menos tú.
Eres más verdad que lo demás.
El once de septiembre del veintiuno
nació el ochenta y cuatro del veinte
como putas que no follan,
que solo calientan la polla.
Eran falsos los aviones,
verdadera la demolición controlada,
el misil pentagonal,
la maniputación televisiva
hacia las mentes que chupan,
que chupan y tragan.
Ya no quiero saber,
ni de la puta ni del rey,
ni de los hijos ni de los nietos,
ya no quiero saber,
lo que sin querer, ya sé:
Que al corral de los borregos
en el charco del reflejo
le mueven y pintan vallas,
vayas donde vayas.
En el pesebre
siguen los de siempre,
y las cabras,
mordiendo flores
en los ribazos y las barrancas:
por tierras verticales.
Me parece que ya estamos en el mismo estado.
ResponderEliminarPero que abuuuuurrriiiiidas son las vacas.
Un abrazo.
Las vacas aburren las más de las veces, pero las cabras nunca.
Eliminarabrazo s
eeee, nuevo cuadro !!
ResponderEliminarb7s, de sil
eeeeeeeeeeeto, no, es un detalle del mismo,
Eliminarde las tierras verticales, de "mariposas que nacen del ombligo"
b7s
Farolas putas de teta hospitalaria,
ResponderEliminarde luz en los tejados gatos
y llagas en el desdén
de tanto usarlo.
Compañías rotas por un jirón
de realidad fugada,
de herida abierta al ron
y a la noche.
Besos que abusan de la lengua
de las mariposas viudas,
de la saliva que salpica
la pasión oscura.
Y si…
añoro el deslizar lento y firme
por las venas de los ritos
nocturnos y alevosos…
cargados de olvido…
Y el suave navegar por las miradas
preñadas de reojo,
de indiferencia y desprecio,
hacia el poder establecido que
absurdo,
llorón,
estremecido por
el miedo a perder,
a perderse,
se revuelca en la escoria
de su vida malgastada.
Pero estas tú,
y la poesía,
y la expresión anhelante del niño
en el alma,
de la infancia cándida reflejada
en cada arruga
que me surca,
que regala dignidad
a mi lucha…
a la lucha de tod@s los que hemos decidido
vivir.
Cuando llega el poeta
ResponderEliminarlas flores se abren con alegría,
sin mirar,
si es de noche,
o si es de día.
Se abren las ventanas,
de las casas de ojos,
se abren las pestañas
y la glándula pineal.
Cuando llega la voz del poeta
la idea o la palabra,
el mundo se pone en marcha.