estan vivos

En las primeras posesiones, los vómitos verdes, acompañaban a los espasmos de lucha, donde era dura y constante. Pero aquello quedó atrás, a día de hoy, los aspirantes se autopublicitan para ser elegidos, y después aceptan todo el proceso, sin lucha, porque ya estaban predispuestos.
El mundo es nuestro.
Guerras, corrupciones, prevaricaciones, actos infames se repiten de uno a otro ayuntamiento, consistorio, gobierno regional o central. Con sus mejores intenciones, las almas se vienen  a nosotros para gozar del pastel que otorgan los derechos de pernada electoralmente conseguidos.
Son nuestros intermediarios, los que nos ofrecen su alma a cambio de placeres e inmunidades.
Rara vez alguien exige que le sea devuelta su alma mancillada, pero cuando eso ocurre, nos es incluso más dulce, pues en ese momento, pierde las impunidades y un mundo de dolor llega a su nueva vida, donde termina en una cárcel sin privilegios, aventadas sus monstruosidades a la plebe como si de caramelos se trataran.
Y ese es el método por el cual, los nuevos intermediarios, saben a lo que se exponen si la posesión falla.
El mundo es nuestro.
 Dominamos todas las esferas de poder, en todos los países, regiones y pueblos, promoviendo guerras, enfrentamientos y muchas injusticias a la vista de todos.
Somos los orcos de Sauron, nuestra máxima felicidad es el dolor ajeno, y aunque nos veas en los cuerpos de presidentes, alcaldes, regidores, diputados, o incluso secretarios, somos los orcos de Sauron, los dueños del planeta Tierra.
La Tierra Media sigue siendo el lugar en donde los intermediarios se acercan para ser poseídos.

https://www.youtube.com/watch?v=rdSay6s9AA8