Era un día lujoso
De abril o mayo quizás
La luz amenazaba con dar propina
Y el Termómetro
Flotaba en boya de pescar
Los vientos descansaban en sus casas
De los últimos ajetreados días
Dejando bailar a la poesía
Entre los párrafos escalonados.
Era hoy y aún dura
Revoloteando la felicidad
Desde la mismísima ausencia
Desde el todo vuelve
Hasta el nada es para siempre
Era ayer u otro día
Ya no me acuerdo
Quizá mañana
Y yo me alegra que hayas vuelto, te echaba de menos, y es verdad que nada es para siempre, y todo vuelve.
ResponderEliminarUn besazo.
Voy a volver, o estoy volviendo los deseos y la realidad algunas veces necesitan trabajo para que se acoplen,
ResponderEliminarBesos