Soy perro de presa
cuando
muerdo
me rompes los dientes
o arranco la carne.
Ya
sé que vinimos a cazar elefantes
mas le mordí al tigre.
Los
paquidermos son importantes
pero pueden esperar.
La tribu
aplaude estos encuentros de luz
donde el rey se deja ver
en
un principito viajero
preocupado por su rosa..
Aprender a
quererse y dejarse querer,
reflexivos en el espejo
persiguiendo maravillas
y conejos albinos.
Es hora de
volver,
te he dejado el avatar
maltrecho de golpes
ajado
de años
y deseoso de ti.
El mundo ha cambiado algo,
persisten las tierras verticales
y dormimos para soñar
los tesoros de las lágrimas
donde el alma se asoma con
poder
a un mundo nuevo.
Este es el testigo, eres el
relevo.
Eres libre
ninguna ley te somete
todos los
seres son tus hermanos.
El miedo a la vida ya pasó
pasó
hasta la misma vida
te dejo una eternidad
ante los
verticales crepitares
de carrascas roqueras.
Aunque en desigualdad de condiciones, me sirve pensar que todos somos hijos de una misma humanidad. Cada quien en su curso, matrícula, clase social, política o nacionalidad...y muchas veces matandonos por un trozo de parcela de la llamada " bienestar "
ResponderEliminarMe sirve sentir que " aprender a amarse y dejarse amar " es bálsamo sanador para una piel quemada por tanto ego emocional
* Siempre nos quedará París 😉
Esa enfermedad occidental que llamamos depresión es ignorancia de quererse y trauma de dejarse querer.
EliminarSalud
Os