que la sexualidad es sagrada,
que te derriba los muros
que tú creiste murallas
con una sonrisa y un reproche,
con una indicación y una enseñanza,
disuelve en espiral los tabúes
y borra todas las amenazas.
Ya no hay bocas que invadir
ni vaginas que penentrar;
el sagrado receptáculo de la vida
es símbolo de addmiración
en donde el tiempo se venera
cuando lo femenino es Dios.
Todos los hombres patriarcales
ignoran que su infelicidad
reside en querer dominar,
invadir y penentrar sin veneración,
en amar al sistema animal
de competir sin adorar.
El uso de la palabra es demencial
si amo al amo, no sirve el servir,
si el soma de los amos nos nutre,
con la summisión del servilismo
de nada nos sirve vivir.
Cuando el amor no tenga amo,
el uso de la palabra será proverbial
y el pro de todos los verbos
se sustantvivirá.
la mujer es alegría e inocencia al mismo tiempo, la cual llena de prejuicios uno, como con una flor, va deshojándola con calma le hace sentir placeres desmedidos.
ResponderEliminarsaludos.
No le encuentro sentido al comentario. Por un lado las llenamos de prejuicios y a la vez, al deshojarlas les damos placer.
EliminarLa mujer es un tema dificil, pero todo es má sencillo si ella coje el mando.
saludos
no es uno el que las llena de prejuicios, sino la sociedad en su conjunto, luego ellas tardan en despercudirse de ellas.
Eliminarsaludos.