dos dientes.

El bi-dente, es aquel que tiene dos dientes. El "bi" es siempre aproximación a la dualidad.
Los videntes, son los que ven de lejos. En los Vedas ya se comenta que "los más altos videntes de los más altos cielos también ignoran el origen de la Creación", y aquí, sin tapujos, llaman videntes a los dioses, a los primeros, a los primeros dioses, que son los que tienen capacidad de ver de más lejos.
En la Matrix actual, se nos conduce de manera inequívoca hacia una limitación constante en pensamiento.
Nadie presupone que si un vidente tiene alguna capacidad de ver para adelante en esta realidad, tiene muchas posibilidades más de ver para atrás en todo aquello que nos condujo a esta manifestación. Estamos sujetos a un revisión constante de nuestros recuerdos. Y somos conscientes de ello.
El programa televisivo "Miénteme como pasó" es un ejemplo claro de esa manipulación histórica hasta dentro de nuestros recuerdos. ¿Qué no será de aquello que no está ya ni en los recuerdos de nuestros abuelos? La novela 1984 de Orwell fue un caso de videncia.
Otorgamos con demasiada facilidad la predisposición a creer, y quizá ya no corresponda. Mientras los padres se preocupan por el bienestar de los hijos, es negativo cuestionarles todo, pero cuando se comprueba que los dirigentes son una atajo de cabrones, lo mejor es cuestionar sin pausa.
Hasta el divino Platón hablaba de "mentiras piadosas", enfocadas hacia el bien de quien se le miente, pero en la actualidad, la soberbia, impunidad e hijoputez de los que ostentan poder es innegable.

Esperaremos sentados, como buenos ciudadanos, al liberador de los males.

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Si me despiertas tú
el sol sube más alto,
el mundo se hace más grande
y los cielos hacen fiesta.
Si me despiertas tú
la palabra se hace canción,
y música la mirada
si me despiertas tú.