cuando vuelan tus dedos
buscando valentines
en catorces de febreros.
Ay! Cuando corren
cuando corren tus ojos
y las hojas del otoño
se caen del calendario.
Ay! Cuando te quiero
en el contagio de bostezos
de amores hambrientos
con las fauces al acecho.
Ay! Hay amores encontrados
y luces de enamorados.
¿Cuándo? Siempre siempre.
¡Cuándo! Siempre siempre.
Cuanto te quiero amor,
amor, ¡Cuánto te quiero!
Parece un ejercicio de puntuación ortográfica.
ResponderEliminarEs que hay algunos, que reciclan todo y son capaces de aprovechar hasta las virutas del lapicero.
EliminarFeliz año, Julio.
No entiendo como el comentario de http://lareinadelpaisdeloshongos.blogspot.com.es/ aparece en mi correo asociado al blog, pero no aparece en el blog.
ResponderEliminarQue sepa la MaLquErida,que no fui yo causante consciente de su ausencia aquí. Si hay duendes o malas configuraciones es otro cantar,
saludos
Buen ejercicio el del fin de semana.
ResponderEliminarY entiendo que amas al amor que te mantiene enamorado de tu musa, por eso, porque te inspira.
Y entiendo que suspiras por ella... por la inspiración
que arranca versos osados con títulos desconcertantes.
Y entiendo que para ti existe "siempre", ilusión de enamorados.
Y confieso que también quiero ese amor, que me lleve a cobijarme entre las sábanas.
El amor es todo.
Eliminarenamorarse una parte.
las sábanas una porción.
el beso la inspiración.
anónimo con las orejas fuera.
siempre siempre es ilusión.
Agacho mis orejas, pegadas a mi cuello, como el gato que araña mi alma.
EliminarNo creo en el "todo" ni en el "siempre". No creo...
crea, en tu mano está.
Eliminar