ni ser burro ni zanahoria,
se trata de parar la noria
porque solo podemos llegar a ser
lo que siempre somos;
agua.
Energía que nos chupan
siendo los asnos nosotros
por dar vueltas infinitas
para aquí o para allá.
Las derechas, las izquierdas,
los rojos y los azules,
para partir y competir
los unos contra los otros.
Hoy trabajas de perro
y mañana te toca de oveja,
puedes llegar a ser cerdo
pollo joven, gallina vieja,
en corralitos con banderines
o en corrales con banderas.
Todas las rebeliones fallaron,
lo cual no impide intentarlo.
Y si el camino fuera otro?
La tierra plana cambia el chip
más que todas las sectas:
meditaciones, retiros y drogas,
no consiguen cambiar nada,
y todo lo cambia la Tierra Plana,
todas las rebeliones fallaron porque se ensimismaron en el cómodo aburguesamiento que les hizo olvidar las desigualdades contra las que lucharon y que terminaron volviendo con suma fuerza.
ResponderEliminarsaludos.
Un placer leerte de nuevo.
EliminarSi todas fallaron, tendremos que buscar algo nuevo. No será fácil, pero antes que seguir repitiendo lo que no funciona, vamos a pensar mejor la estrategia, como si de un nuevo campeonato de ajedrez se tratara.
Sabemos en que nos ganan, en el acomodamiento burgués al que llegamos para quedarnos.
El bienestar es una teoría que nos coloca viviendo en un malestar. No estamos bien, a miles se suicidan todos los días, aunque no salgan en la tele.
El bienestar no es más que aceptar nuestra cobardía o impotencia para dejar pasar los años en entre-teni-miento.
saludos