martes, 11 de septiembre de 2012

Ese es el once.

Ese, aquel y el otro,
el once somos todos,
por encima del diez
en el mes de por debajo.
Mosquitos otoñales
en la piel del universo,
chupasangres, robaalmas
todo junto en scherzo,
en un opus para sol
con espacios musicales.

Ese serpiente
once octubres después,
recuerda las mentiras,
oficio de testar engaños
y descubrir en el corral
los pesebres bananeros
en época de trasquilar
o llevar al matadero.
Ver los perros encorbatados
azuzar los esquilones
cuando llega San Martín
con les porres en el brazo:
yo soy el buen pastor,
yo soy el apacentador,
el de la letra pequeña
que nunca leéis.



2 comentarios:

  1. Bueno, lo intentaron. No pudieron repetirlo, ni llegaron a ensuciarnos los zapatos siquiera.

    Secos están, momias de siempre pero ahora más.

    Lo del pastorcito es genial, jajaja. Además en negrito, como para dar más lástimita, jajaja. "Pero sí yo he sido muy gueeeno, y ahora me dicen que soy un estafadooor".

    En fin.

    Besos.

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  2. lo intentaron, ya poco les queda, ni a nosotros, quizá.
    auraalma

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