Me di siempre
me di del todo
por las seis caras
del dado
cuánto me di es una incógnita
me di sin medir
por todos lados
por los seis las tres veces
en la base de carbono
en la cuarta dimensión.
No hay esquinas en la plaza
y se nomina igual
por el uno sale el toro
y por el seis el arrastre
en el tres el picador
en el cuatro la puerta grande
y se nos burla la vida
con sus abanicos de flores
si no hay salida en los bordes
vayamos a morir al centro
sin buscar refugio
mas que en las letras
que escriban en la arena
lo efímero del mundo.
Entremos al trapo
y salgamos sin rabo
las afueras están en el medio
no hay esquinas que medir
no hay ángulos que sumar
todas las astas
son hastas que cornean
cuando amenazamos
llegar a las estrellas
cuando somos iluminamos
y las estrellas zurean
sus torcaces cuellos
de anillos azules.
Solo nos resta volar
y crecer y multiplicar.
Dichosa edad
en la que poetas y maestros
imparten desde sus estómagos vacíos
las voces del más acá.
Swiiiish.... Ocurrente, Sobresaliente
ResponderEliminarSoy reiterativa pero no puedo dejar de decir el placer que es leerte
Esos que me lees con buenos ojos, un abrazo fuertote
EliminarEl ave buscando su mejor pose para la foto.
ResponderEliminar¿Cuál es la medida de darse?, personal e intransferible, lo que cada uno considere. Rafa Jinquer
Dejarse fluir es una buena opción aunque siempre me gustó la metáfora del árbol que se convierte en barco para poder ir contracorriente.
EliminarMa i a.