sin disimulo las desgracias propias,
y son tan emotivas las lágrimas,
los sollozos son tan sinceros,
que se entra en la viudez,
acompañado y solo
acompañada y sola
en velorios fabricados
mezclando lo real y lo ilusorio
como se mezclan el agua y el vino,
viendo donde está la insulsa mentira
cuando llega el trago al imaginario paladar.
polvo somos, polvo seremos
el dolor es vehículo de conciencia
la vida sigue igual.
pareciera que mi post en torno a la muerte, te inspiró. sólo digo.
ResponderEliminarhay herencia cultural tanto judía como cristiana en el texto.
saludos.
Así es Draco, dentro de mi línea terraplanista este post es un descanso.
EliminarPero sobre la muerte no llevas solo uno, llevas toda una secuencia, y eso tendría que influir en algo, porque todo en la vida está conectado, hasta la muerte.
A mí, personalmente, esta ambiguedad fabricada, con el idioma castellano, me encanta. Porque hasta la muerte misma esta ivolucrada en la conexión de las cosas de la vida, o las cosas de la vida de la vida están conectadas hasta que llega la muerte y las separa.
Y ya, con esto, entramos en la línea de las Parcas, cortadoras de hilos, conexiones, la otra con la guadaña, que también corta,y todos los personajes con cuerpo y alma de este lado para personificar lo que no tiene ni cuerpo ni alma: la muerte.
Que solos se quedan los muertos,( que decía el poeta.)
saludos